El CR Tarazona regresa a la Liga regional este sábado a partir de las 16:45 con la visita al Gigantes de Navarra tudelano, un encuentro de proximidad entre dos rivales que se conocen bien y en el que el equipo de Joao Henriques tratará de resarcirse de la última y decepcionante derrota en Zaragoza frente al Ibero, hace un par de semanas. Será una prueba de recuperación frente a un Gigantes que debuta en su campo, el Nelson Mandela, un escenario siempre complicado para cualquier visitante y que exigirá al Rugby Tarazona ser riguroso en la batalla física y tratar de imponer su juego abierto y la velocidad.
Para ello deberá mejorar las prestaciones ofrecidas en el Velódromo, en su última aparición, cuando no logró pulsar la tecla del rugby que busca esta temporada ni dio con las estructuras de juego necesarias para buscarlo. La amplia derrota en Zaragoza -un 36-5 acelerado con varios ensayos encajados a partir del minuto 60 después de una hora de relativo equilibrio- ha espoleado en estas dos semanas el ánimo de los jugadores y su cuerpo técnico, dispuestos a quitarse el mal sabor de boca en la visita a Tudela.
El Gigantes ha disputado hasta ahora sus dos encuentros a domicilio: abrió la competición perdiendo 34-12 en la Universidad de Zaragoza frente al Cefa Unizar y, una semana después, cayó en el campo del Ejea (38-20). Así que el Rugby Tarazona se va a medir a un bloque también hambriento de victoria. Para ganar deberá dar más consistencia a su rugby durante los 80 minutos y sobreponerse a la rotundidad física y el oficio de un equipo en cuya columna vertebral aparecen jugadores con mucho rugby a las espaldas como José Ignacio Ariza, Diego Villán y Feli Simón. Todos ellos, además, viejos conocidos del Semi tras su paso por el club a mediados de los 2000, durante los dos años en que el conjunto turiasonense militó en Primera Nacional.