El Tarazona se hunde en los últimos 20 minutos ante el Ibero

El CR Tarazona se perdió en su visita a Zaragoza. Valga el símil para resumir un partido de bajo nivel por ambos lados en la primera mitad, y que en la segunda se rompió del lado del Ibero CR a partir del minuto 60: en el último cuarto del encuentro el equipo zaragozano anotó cuatro ensayos, dos de ellos transformados, para cerrar una amplia victoria por 36-5.

Lo más contradictorio fue la sensación nítida de que esa parte final del choque había venido precedida por el mejor pasaje de juego del Tarazona, que dominó la posesión y jugó en territorio contrario desde la vuelta del intermedio hasta la hora de juego. En ese tiempo, dándole continuidad a su rugby, percutiendo con dureza desde su primer centro y con las incursiones del tercera Manu Sanclaudio y las rupturas de Gabi Zueco desde el 10, el equipo enlazó fases de juego en la 22 contraria, forzó golpes de castigo y jugó touches a cinco. Pero siempre le faltó algo para terminar esas jugadas. Un detalle de ejecución o una acción de desequilibrio que le permitiera pisar la zona de marca. Y además el Ibero cerró caminos con rigor en el placaje.

Manu Sanclaudio rompe en la línea contra el placaje de varios rivales.

En ese momento el partido marchaba todavía 12-5 a favor del Ibero. Una distancia salvable. Los locales habían abierto el marcador con una ruptura por el carril central a los cinco minutos de partido. Después ensayarían en la esquina tras hilar varias fases por delantera, con buena conservación de la pelota. Fue un primer periodo plagado de errores por parte de ambos, muchos golpes del Semi en los rucks, apoyos poco coordinados en ataque, balones caídos que llevaban a melés y, en general, muy poca continuidad. Cliff Cáceres había reducido distancia con una escapada por el costado antes del intermedio.

Tras la infructuosa fase de presión del Tarazona en el arranque del segundo periodo, con algún golpe frente a palos para reducir distancias que el equipo jugó al lateral, el Ibero salió de las cuerdas. Y lo hizo para ganar el partido de largo. Primero con dos ensayos por la misma vía -empuje delante, transmisión y la defensa que no puede contener la entrada en la marca-, y después con alguna escapada en ventaja aprovechando la desestructurada defensa turiasonense… Así hasta el 36-5 final, frustrante para el conjunto de Joao Henriques y Jaime Milla.

El equipo sigue en formación y necesita tanto trabajo como paciencia. Tras el largo parón por la pandemia, la reestructuración de la plantilla y el relevo en el cuerpo técnico, el Tarazona dio la de cal en su visita al Velódromo. Ahora dispondrá de dos semanas de trabajo para reagrupar líneas y preparar la visita al Gigantes de Navarra en Tudela.